Comer fuera: Faruk, restaurante marroquí en Bilbao

¡Hola mis ·Beautiful and Damned·! ¿Qué tal va ese fin de semana? Yo no tengo mucha queja. Aunque hoy ha tocado hacer un rato de maruja  (ya sabéis, un poco de limpiar, alguna lavadora, llenar la nevera para la semana...) por lo menos lo he compensado que el estupendo plan que hice anoche con unos amigos.

Hace unas semanas me comentaron que habían abierto una tetería / restaurante marroquí en Bilbao y decidimos que íbamos a aprovechar una quedada en grupo para ir a echar un vistazo. Después de tener que cambiar la fecha un par de veces, por fin ayer, viernes, fue el día elegido para conocer Faruk (Iturribide 86). Y puedo decir que fue una noche estupenda. 

Buena comida, en un ambiente muy agradable y por supuesto, buena compañía. Tengo que decir que la atención durante el proceso de reserva fue muy amable y paciente con nuestros cambios de planes. Al igual que en el restaurante, tanto durante como después de la cena, ya que nos quedamos charlando brevemente con las personas que nos habían atendido mientras nos hacíamos algunas fotos.

En atención al hecho de que éramos seis personas, nos prepararon el salón especial, que es como un reservado con sofás en la zona más tranquila del restaurante. ¡Y eso sin saber que yo iba a tomar nota para contároslo todo aquí en el blog!

Me dejo de rollos y os cuento lo que comimos. Nosotros elegimos la opción del menú fin de semana (19,90€) En este menú se pueden elegir un primero, un segundo y un postre de la carta por lo que decidimos aprovechar para pedir cosas diferentes y compartirlas entre todos. Las otras opciones son comer a la carta o el menú especial fin de semana (50€ para dos personas y con unos platos más o menos fijos)

Estas fueron nuestras elecciones:

Primeros platos

Ensalada Faruk

Ensalda de piña, nueces y gamba

Sopa Harira

Flamiche de puerro y queso

Las ensaladas ricas y con un punto diferente. Mención especial merecen la sopa Harira, que a mí personalmente me encantó por la mezcla de especias y sabor a legumbre, y el flamiche de puerro y queso. Riquísimo y nada pesado. Recomiendo los dos sin ninguna duda.

Segundos platos

Cous cous de verduras

Cous cous de pollo

Pastilla de pescado y marisco

Kefta

Tagine de pollo

Todos los segundos muy ricos también, pero me gustaría hacer mención especial al cous cous de pollo. Exquisito y con un delicado sabor a comino que dejaba con ganas de comer más. No se cómo marinan esas pasas,  pero estaban espectaculares. 

También se llevo muchas alabanzas Kefta, que para los que no lo conozcan, son albóndigas de carne con especias. La salsa estaba para untar hasta rebañar la cazuela. 

El tagine de pollo y limón confitado muy ligero y con mucho sabor. Falta la foto del cous cous de cordero, que para cuando nos dimos cuenta no había suficiente en el plato para hacer una foto decente. Con eso lo digo todo :O)

Además de las opciones incluidas en el menú, nosotros decidimos pedir una pastilla de pescado y marisco para no quedarnos sin probarla. Estaba también rica y en su punto. Perfecta para compartir entre todos. La próxima vez tendré que probar la de pollo, ya que me quedé con ganas y nos parecía ya demasiado.

Postres

Flan de huevo

Tarta de queso y caramelo

A pesar de estar ya bastante llenos tras haber compartido toda la comida, decidimos probar también los postres. ¡Ay omá! Las pastas de té marroquíes estaban riquísimas. Tanto que no nos dio tiempo ni a hacerles una foto.

Y la tarta de queso con caramelo... hasta yo me comí casi una ración entera. Y cualquiera que me conozca sabe que NUNCA como tartas o pasteles. Deliciosa. El flan también muy rico y ligero.

En resumen, comida casera, rica, cantidad adecuada, con matices especiados en su justo punto, por un precio muy razonable y en un ambiente relajado y tranquilo. Tengo el deber de comentar que quizás por ser un grupo o por estar en la zona más tranquila / alejada del comedor el servicio fue un poco lento y la cena se nos alargó bastante, Pero dado que la compañía era agradable y estábamos muy a gusto, casi ni nos dimos cuenta. 

¡Ah si! Mencionaros también que en Faruk no sirven bebidas alcohólicas, por lo que si un buen vino o una cerveza es un requisito indispensable para que disfrutéis de la cena, no es el sitio para vosotros. La verdad es que nosotros no lo echamos de menos en absoluto. La comida hablaba por sí misma.

Y esto es todo por el momento mis ·Beautiful and Damned·. Os dejo que echéis la siesta tranquilos. ¡Disfrutad del fin de semana!