Viajes: Hotel Santos Express, Mossel Bay

Santos Express - Mossel Bay

En 2007 tuve la suerte de viajar a uno de los países que más me ha impactado en mi vida: Sudáfrica. Bueno, debería decir una parte diminuta del país, porque a pesar de haber conducido un montón de kilómetros en las dos semanas que pasé allí solo llegué a disfrutar de una mínima fracción de todo lo que tiene que ofrecer. Durante esas dos semanas recorrí junto con un amigo Ciudad del Cabo, Cabo de Buena Esperanza, Cabo de Agujas, la zona de viñedos y una parte de la Garden Route y alrededores. Todos estos parajes se encuentran al suroeste del país. 

Y así fue cómo acabé en el Santos Express: tras pasar 5 días en la zona de Ciudad del Cabo mi amigo y yo nos dirigimos hacia Mossel Bay, a unos 400 km de distancia. Mientras yo cruzaba el sur del país a ritmo de Faithless bajo el sol abrasador del verano sudafricano notaba que él se iba poniendo nervioso. 

No hacía más que mirarme de reojo con preocupación, así que al final le dije "Suéltalo porque vas a reventar. ¿Qué pasa?" y empieza a dar rodeos: que si "igual el sitio que he reservado para las siguientes noches no es muy de tu estilo", que si "igual me vas a matar cuando lo veas", "si quieres cambiamos y nos quedamos en otro..." Y yo ya acojonada imaginándome en algún antro rodeada de delincuentes de todas las nacionalidades dispuestos a robarme hasta los chicles.

Foto tomada de http://coffeeandpassports.com/

Nada más lejos de la realidad. Cuando llegamos a Mossel Bay y encontramos la playa lo primero que vi fue un tren azul larguísimo varado en las vías que morían allí mismo. Y cuál fue mi sorpresa al ver que nos dirigíamos al vagón frontal en el que se encontraba la Recepción. Desde allí también se accedía a una terraza de madera que colgaba sobre la playa en la que había un restaurante con las mejores vistas que se pueden pagar con dinero.

A estas alturas yo estaba un poco alucinada porque no entendía nada y no veía dónde podían estar las habitaciones. Resulta que lo tienen muy bien montado. Los compartimentos del tren se han convertido en habitaciones individuales o dobles (dependiendo del tamaño) en las que los asientos originales de cuero son las camas. Como veis en la foto el espacio del que dispones es muy reducido. Y en cuanto a wc y ducha, uno por vagón a compartir. Pero todas y cada una de las "habitaciones" tiene vistas a la playa y hasta nosotros llegaba el sonido de las olas.

Santos Express - Mossel Bay

De buenas a primeras decidí que mi maleta y yo no teníamos cabida en la habitación, así que la dejé en el coche y cada mañana, después de darme un baño maravilloso en la playa, pasaba por el coche y cogía la ropa que iba a utilizar ese día. Después ducha y a desayunar a la terraza mirando al mar.

Seguro que a muchos no os convencen estas condiciones tan básicas, pero por 6€ la noche con desayuno, a mi me pareció una auténtica ganga. Y Mossel Bay es la base perfecta para visitar un montón de destinos turísticos de los alrededores. Por lo que después de 5 días me marché del Santos Express con mucha pena. Y deseando volver algún día.

¿Qué me decís? ¿Alguna vez os habéis quedado en un hotel tan curioso? ¿Os plantearíais pasar vuestras vacaciones en un tren?