Google+

viernes, 2 de agosto de 2013

Libros: La Acabadora de Michela Murguía por B. Santamaría

“La eutanasia es la acción o inacción hecha para evitar sufrimientos a personas próximas a su muerte, acelerándola ya sea a sabiendas de la persona o sin su aprobación. Se puede considerar también como el hecho de morir sin experimentar dolor”

La Acabadora de Michela Murgia
La Acabadora de Michela Murgia

Hoy queremos comentaros La Acabadora, un libro de Michela MurguíaLa vida y la muerte vertebran toda esta novela; la angustia personal ante la muerte, ese igualitario y definitivo estado del ser humano, como proceso final de la vida y que forma parte ineludible de ella. La muerte, o la sensación de provisionalidad y fragilidad de la vida, ha sido siempre tema de interés en cualquier sociedad y momento de la historia y constantemente representada  en teatro, pintura, cine, novelas …

Este libro está basado en una figura imaginaria de la cultura popular sarda y refleja la vida rural en la Cerdeña más profunda donde las tradiciones y supersticiones se han ido manteniendo hasta el día de hoy. Así,  describe disputas de vecindad por las tierras o costumbres ancestrales como la preparación de las bodas con su vestuario y banquetes o los funerales, plañideras incluidas.

La figura imaginaria, personaje principal de la novela es Bonaria Urrai, modista del pueblo de Soreni, que de día cose trajes y por las noches, al margen de curas o  iglesias,  “ayuda” a sus vecinos en ese proceso final de la vida, como una comadrona lo hace en los nacimientos. Bonaria, a la que el pueblo respeta pero teme, es una mujer ya mayor, sin hijos, eterna “prometida” de luto por un soldado que nunca volvió de la guerra que decide, según una antigua costumbre local, adoptar como “hija del alma” a María, última hija nacida de una mujer viuda que ya tiene otras tres a las que apenas puede alimentar debido a su pobreza. 

Por este motivo se la cede a Bonaria que se encargará de mantenerla y educarla. Es una adopción “sin papeles”  que no impide a la niña mantener el contacto con su familia. María, ajena al otro “oficio” de su madre adoptiva, crece razonablemente feliz junto a ella, aprendiendo a coser y asistiendo a la escuela bajo el férreo control que sobre ese tema ejerce Bonaria. 

Pero a la atenta mirada de María no se escapa el extraño comportamiento de la modista  en sus salidas nocturnas, de las que nunca da explicación,  siempre acompañada por alguien del pueblo que minutos antes ha ido a buscarla a la casa.

Cuando María, joven aún y sin experiencia de la vida descubre el tipo de “ayuda” que proporciona su madre adoptiva a los vecinos del pueblo, se produce una dura conversación posterior entre ellas donde María, entre reproches, pregunta a Bonaria de qué manera lo hace,  cómo les  ayuda a morir,  a lo que Bonaria contesta: “No puedes juzgar el cómo sin conocer el por qué”. María, incapaz de asimilar el descubrimiento, se aleja de Bonaria y del pueblo.

Y porque la vida es la incansable Gran Maestra, un tiempo después pone a María ante una situación que en el pasado juzgó sin conocer, cuando la enfermedad y la lenta agonía de Bonaria, le hacen volver al pueblo a atenderla. 

A mi juicio y a pesar del tema que trata el libro, es una historia muy bonita, bien escrita (pierde algo de fuerza cuando María abandona el pueblo pero la retoma cuando vuelve) que os hará pensar más en los “por qués” que en los “cómos”. 

 Michela Murgía es una escritora nacida en un pequeño pueblo llamado Cabras, en la isla de Cerdeña, en 1972. Estudió Filosofía y Teología y su primer libro fue un ensayo sobre las nuevas formas de explotación en el trabajo, basado en su experiencia en el mundo laboral. “La Acabadora” estuvo durante muchos meses encabezando la lista de los libros más vendidos en Italia donde recibió el prestigioso Premio Campiello en 2.010.



    

No hay comentarios:

Publicar un comentario