Google+

sábado, 22 de noviembre de 2014

Comer fuera: Restaurante Colombo

¡Muy buenos días mis ·Beautiful and Damned·! Aquí estoy de nuevo dando la lata con mis historias. Después de una temporada sin probar ningún sitio nuevo, hoy por fin os traigo una crítica de un restaurante al que he ido un par de veces en el último mes y medio: el restaurante Colombo.

Detalle de la bolsa de pan
Detalle de la bolsa de pan
Para los que no lo conozcan, el Colombo es un restaurante que lleva funcionando desde este verano en Bilbao. He leído comentarios que comparan su decoración con el estilo de muchos restaurantes en Nueva York y me parece una actitud un poco provinciana. Parece que todo lo que tiene un aire hipster recuerda a Nueva York. En realidad yo lo compararía a los restaurantes que encuentras en cualquier gran ciudad como pueden ser Nueva York, Londres, Bangkok o Tokyo, por ejemplo.

La verdad es que ha arrancado con mucha fuerza y a día de hoy los sábados es difícil encontrar una mesa si no se reserva con antelación. Ha dado la casualidad de que he ido dos veces en poco tiempo y el ambiente siempre ha sido muy bueno. 

Detalle de la decoración del Colombo
Detalle de la decoración
Me gustaría resaltar especialmente el trato agradable y extraordinariamente amable sin llegar a ser pesado que he recibido en mis dos visitas. El personal que nos ha atendido en cada ocasión se ha tomado un momento para preguntar qué tal estaba todo y si estábamos a gusto, contestando las preguntas que les hice sobre alguno de los platos con paciencia y una sonrisa. Así que enhorabuena por la selección de personal.

Solo le pongo una pega, y es que los sillones color mostaza me parecen demasiado altos para las mesas, lo que hace un poco incómodo y difícil comer sin mancharse. En mis dos visitas me ha tocado sentarme en uno de ellos y me sentía como una princesa entronada. Pero es una pega más anecdótica que otra cosa.

No me enrollo más y os cuento lo que comimos. Ya sabéis que hago fotos hasta de una piedra si me parece mona, así que podéis ver también la presentación. Me disculpo por la calidad de algunas de las fotos, estrenaba cámara y no tenía tiempo para estar enredando con los ajustes.

En nuestra primera visita pedimos como entrantes la ensalada de queso de cabra, pera dulce y piñones y hummus con láminas de berenjena tostada y pan de pitta para untar. Los dos me encantaron y me hicieron untar el plato con el pan.

Ensalada de queso de cabra, pera dulce y piñones
Ensalada de queso de cabra, pera dulce y piñones

Hummus con berenjena tostada
Hummus con berenjena tostada
En nuestra segunda visita probamos el tartar de aguacate, tomate y queso de cabra y parmiggiana (berenjena gratinada con queso) Muy correctos los dos aunque no tan especiales como el hummus y la ensalada de pera.

Tartar de aguacate y tomate
Tartar de aguacate y tomate

Parmiggiana
Parmiggiana
En esa primera visita como plato principal nos decidimos por el risotto de hongos con jamón y queso idiazábal  y el cous cous de pollo. El risotto fue  más que correcto, muy rico la verdad. El cous cous es el plato más flojito de todos los que he probado. No me supo a nada especial, ni bueno ni malo, ni soso ni salado. No tenía nada malo pero no volvería a pedirlo. Si os digo la verdad, me gusta mucho más el que hago yo en casa y que os enseñaba en esta receta.

Risotto de hongos con jamón y queso idiazábal
Risotto de hongos con jamón y queso idiazábal

Cous cous de pollo
Cous cous de pollo
 En la segunda visita probamos la hamburguesa vegetal y la hamburguesa de pollo. Las dos vienen con patatas fritas y estaban para chuparse los dedos. La ración muy generosa y entre los entrantes y las hamburguesas salimos a punto de estallar.

Hamburguesa de pollo con patatas
Hamburguesa de pollo con patatas
Eso no impidió que Mr. Beautiful and Damned encontrase un huequito para probar los postres. En la primera visita eligió el postre de chocolate y en la segunda una selección de helados que incluía uno de gin-tonic.

Postre de chocolate
Postre de chocolate

Selección de helados
Selección de helados
Conclusión: un sitio muy agradable y correcto, con comida muy variada, para todos los gustos. El menú tiene algunos toques internacionales y otros clásicos de la tierra y como ya he dicho, resaltaría un muy buen servicio y una decoración muy cuidada. La cena para dos con dos entrantes, dos principales, un postre, agua y pan sale unos 25 / 26€ por persona.

Me han hablado muy bien de los Spaguetti picantes salteados con almejas, el pulpo a la brasa con mojo verde y sobre todo de la torrija, así que pueden ser una idea para nuestra próxima visita. Espero que os haya parecido interesante y que me comentéis vuestras impresiones si habéis estado allí. Un beso y nos leemos dentro de poco. ¡Sed buenos!


No hay comentarios:

Publicar un comentario